Los radicales presentaron un proyecto de ley para pedir beneficios fiscales a las empresas que fabrican respiradores y oxígeno medicinal, a las que el Gobierno les prohibió exportar para que puedan abastecer el mercado interno en la segunda ola de coronavirus.

El proyecto lo presentaron en Diputados Josefina Mendoza y Fabio Quetglas y propone crear un registro de empresas que fabrican estos productos para que computen un 50% de sus aportes patronales como crédito fiscal para cancelar el Impuesto al Valor Agregado (IVA). 

Los respiradores fueron uno de los productos más buscados al inicio de la pandemia, cuando el Gobierno identificó empresas fabricantes en Córdoba y concentró las compras para evitar el desabastecimiento. 

Cómo funciona el cartel del oxígeno detrás de la escasez en los hospitales

El oxígeno medicinal se convirtió en un bien preciado este año ante el aumento de casos de covid en muy poco tiempo y obligó al Gobierno a congelar los precios y restringir las ventas al exterior para que no escasee. 

Además fue necesario exigirle a las empresas que prioricen la producción del uso medicinal al industrial y para lograrlo se creó una Comisión de Monitoreo de Insumos Críticos para la atención de Covid-19, integrada por los ministros de Salud y de Desarrollo Productivo, encargada de monitorear la demanda en todo el país.

Mendoza y Quetglas proponen además que durante los próximos 6 meses estas empresas no sean "sujetos pasibles de retenciones ni percepciones del impuesto al valor agregado", los habituales adelantos que cobra la AFIP y complican los balances.

Desde el inicio de la pandemia el Gobierno no otorgó grandes beneficios impositivos y concentró la ayuda en aporte directo a las empresas afectadas por las cuarentenas, que no pasaban por el Congreso. Una fue la eximición del impuesto a las ganancias a trabajadores de la Salud, al inicio de la pandemia.